Discapacidad.

 Como cada 3 de Diciembre, las noticias se llenan de personas discapacitadas hablando de que no son ni luchadores ni ejemplo de nada, son personas. Como discapacitado que soy, no podría estar más de acuerdo, nunca me ha gustado que se me compare con otros discapacitados que han hecho cosas, si, impresionantes y encomiables pero que al final del día son en muchas ocasiones a raíz de situaciones de vida especificas, decisiones correctas en momentos clave y, sobre todo mucha, mucha suerte.

Yo, un discapacitado más, no es que les tenga envidia, al contrario, me parece genial que hayan podido hacer cosas tanto increíbles como también aquellos que tienen una vida normal. Yo sin embargo no he tenido ni esa suerte, ni ese entorno que me haya animado, que me  haya empujado a hacer cosas, que me haya dirigido hacia alguna dirección. Ha dependido de mi, y de la suerte. 

El caso es que a mi no me salen las cosas, pero lo intento, tanto o mas que alguien que no es discapacitado. Los años pasan y pasan y las cosas se ponen peor, pero lo intento. Lo intento.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Salvación.

Noche.